«Ah, princesita, siempre es tiempo de té…» frase que quedó grabada en mi memoria cuando leía a Lewis Carroll en Alicia en el país de las maravillas. De pequeña me encantaba leer esta historia e imaginarme sentada frente a una hermosa mesa en un jardín, con teteras y tazas delicadas acompañada de mis invitadas con modales exquisitos… Creo que de ahi viene mi afición por el té, y mi interés por conocer su historia.
Según la tradición británica a las cinco en punto es la hora del té acompañado de un pequeño bocado dulce o salado. Cuenta la historia que la duquesa de Bedford, Anna Russell, fue quien a mediados del Siglo XIX tomó la costumbre de tomarse un té por las tardes. La ilustre duquesa sentía que se le hacían largas las horas entre el almuerzo y la comida y sobre las cuatro de la tarde desfallecía de hambre. Un día pidió que le llevaran a su dormitorio, casi a escondidas, una taza de té con una pequeña colación. Le sentó tan bien que decidió repetir la rutina cada día y empezó a invitar a sus amigos a compartir el bocado con ella, siempre a la misma hora.Y, como muchas tradiciones, comenzó casi por accidente. Fue ella quien luego invitó a sus amigas a sus meriendas diarias, sentando el origen de las «Tea Party» organizadas posteriormente en la corte inglesa. Estas reuniones en la corte se hicieron tan conocidas, que los británicos no tardaron en imitarlas. Con la aprobación de la reina Victoria, el «Afternoon Tea» se instaló rápidamente en la alta sociedad británica, y pasó a generalizarse a la burguesía hasta extenderse a la clase obrera, marcando así las costumbres y tradiciones de los ingleses.
Con el paso de los siglos, este ritual del té por las tardes se fue desarrollando como una tradición, implicando ciertas convenciones sociales de buenas maneras y de «saber estar» en las reuniones. Hoy se considera la hora del té entre las tres y cinco de la tarde donde hay que asistir de manera puntual. El té de la tarde se sirve en tazas de porcelana fina y se aromatiza con limón, flores, o acompañado con leche.
No se debe soplar…para enfriar, simplemente revolver con delicadeza con la cucharita. Esto es el estricto rigor de las clases altas del siglo XIX que aún hoy se conserva y respeta. Se sirve en una mesa tradicional. Lo más importante, obviamente, es el té. Lo típico es tomar té negro, ya sea Earl Grey, Builder´s o cualquier otra variedad que se puede tomar acompañado de todo tipo de galletas, siendo el shortbread, las custard creams y bourbon creams las más conocidas.
¿Eres de los que disfrutas del momento del té a solas para hacer una pausa en día? o ¿ de los que adoran compartirlo con la familia o amigos? … entonces te invito a que nos encontremos en este nuevo espacio , para hablar de mesas bonitas, aprender nuevas recetas, un poquito de protocolo, cómo organizar una Tea Party y un montón de ideas que poco a poco iré contando. Después de todo…la mesa esta puesta, el té en su punto justo y estamos aquí en el jardín del País de las Maravillas, donde Alicia nos deja su reloj…
«Vaya forma estúpida de matar el tiempo», gritó la Reina. «Y desde entonces… son siempre las seis de la tarde… Siempre es la hora del té y no tenemos tiempo de lavar la vajilla entre té y té»…Lewis Carroll en Alicia en el país de las maravillas.
No olvides para nuestro próximo encuentro tener lista tu taza y prepara-té para disfutarlo juntos.
¡Te estaré esperando! ♥
Fuentes:
Cuando buscaba inspiración para escribir el post encontré esta sesión de fotografías en un shoot precioso inspirado en Alicia en el País de las Maravillas, tal cual como lo había imaginado. Wimshical Alice in Wonderland inspiration. Ruffled-photo by http://ruffledblog.com/whimsical-wonderland-shoot/
http://www.vogue.es/living/galerias/los-lugares-mas-exclusivos-de-londres
https://es.wikipedia.org/wiki/Hora_del_t%C3%A9
http://retratosdelahistoria.blogspot.com.es/2011/12/la-tradicion-de-la-hora-del-te.html